Por sobre todo nos acompañamos, ofrecemos nuestra amistad para caminar juntos la vida y sus dificiles obstaculos.
Juntos generamos un espacio de recreo donde seamos genuinos y abiertos. Aprendemos y nos divertimos.
Compartimos las enseñanzas de Jesús sobre el amor a Dios y a las personas. Crecemos en entendimiento día a día.